La dirección mantiene el ritmo

No hay nadie que lo empuje más a mantener el ritmo que su hijo de dos años, pero en el trabajo, Thomas Sixt, Operations Director de Q-railing desde finales de 2019, rara vez está quieto. Ser extraordinario (en el mejor sentido de la palabra) es lo que más le gusta y por eso es perfecto para Q-railing. Vamos a hacer un breve repaso de su andadura y comentar con él lo que podemos esperar de este extraordinario 2020.

Thomas Sixt se unió a Q-railing en 2015. En principio, fue el General Manager Sales responsable de las actividades de venta de varias filiales europeas y, posteriormente, también de Q-railing USA. A pesar de sus muchos años de experiencia como ejecutivo, no tardó en notar una gran diferencia: «Con su filosofía empresarial abierta y su estructura plana, en Q-railing me he sentido como en casa desde el principio. Quizás parezca algo exagerado, pero tuve la sensación de que por fin estaba donde debía estar». Recuerda especialmente su conversación con el CEO, Ronald Guliker: «Me guiñó el ojo y me dijo de broma que la culpa era mía por haber tardado tanto en encontrar Q-railing. Bueno...».

Aprende, mejora y sigue adelante
Sixt explica que 2018 y 2019 fueron años de grandes cambios internos en la empresa. Comenzó con cambios relevantes en el sistema de software y hardware. «Para Q-railing, entregar y cumplir con los pedidos nunca ha sido suficiente. Al contrario, mejorar continuamente y superar las expectativas es el objetivo que tratamos de conseguir con ahínco. 

No podíamos dormirnos en los laureles y tampoco queríamos hacerlo». Sixt no trata de evitar el hecho de que, durante esa época, también se produjeron situaciones en las que la empresa no siempre pudo cumplir plenamente sus altos estándares de servicio y calidad para los clientes. «A nuestro gran pesar, las cosas no siempre fueron bien, pero hemos aprendido de ello, hemos mejorado y hemos seguido adelante dejando atrás esos desafíos. Ahora, todo vuelve a ir viento en popa».


Desde Múnich hasta el Bajo Rin
Sixt tenía tanta confianza en las oportunidades del prometedor mercado y en la propia empresa, que incluso se trasladó de Múnich a la zona del Bajo Rin para ocupar su nuevo puesto. ¿Que qué? Sixt se ríe: «Sí, la gente me suele preguntar por qué lo hice, pero la respuesta es muy sencilla: de 2015 a 2019, cuando era muy activo en ventas, invertía más del 70 % de mi tiempo en viajar. La mayor parte de ese 30 % restante de mi trabajo lo realizaba en la oficina de Múnich. Al aceptar el puesto de Operations Director, la dirección me ofreció algo que no podía rechazar: por un lado, pasar más tiempo con mi familia y, por otro, unas condiciones de trabajo ideales».


Principales tareas para 2020: innovaciones en línea y de productos

Sixt dirige la empresa con los miembros de la junta Andre van Uitert y Sean Bartlett. «Soy responsable de toda la cadena de suministro, incluida el área clave de tecnologías de la información. Concretamente, eso significa mejorar todos los movimientos de bienes, finanzas e información en el grupo empresarial a nivel mundial». Una de sus principales tareas en 2020 es continuar aprovechando los puntos fuertes de la empresa en un entorno de mercado cada vez más digitalizado: «El enfoque principal seguirá siendo la experiencia del cliente. Por lo tanto, el área on line recibirá mucha atención. Además, queremos inspirar a nuestros clientes con innovaciones. Por este motivo, en primavera presentaremos un nuevo catálogo que contendrá nuevos sistemas de barandillas como Easy Alu, otra barandilla ajustable hecha íntegramente de vidrio y mucho más».

Pasión y humor
Su pasión, ambición, franqueza y sentido del humor son lo que diferencian a Sixt dentro del grupo Q-railing. Además, el fuerte espíritu de colaboración significa que las innovaciones pueden aplicarse tal y como se ha planeado. «Esto solo es posible gracias a nuestros excelentes equipos», subraya. «Nuestros empleados sienten pasión por lo que hacen, y, si es necesario, están dispuestos a ir más allá para que siempre podamos ser un poco más dinámicos que la competencia».